Plantas de cada día; el estramonio (Datura stramonium)

   El estramonio (Datura stramonium) es una planta anual relativamente común en baldíos, cunetas y terrenos abandonados de todo el mundo allá donde encuentre un clima templado o subtropical. Su origen es incierto, algunas fuentes defienden que es nativo de la India, otras de América, mientras que otros lo sitúan en la zona del Mar Caspio. Sin duda una planta controvertida en todas sus facetas.



El estramonio habita en cunetas, baldíos, y como mala hierba en tierras de cultivo.

    Se trata de una solanácea extremadamente venenosa y de enorme variabilidad en el tamaño según los individuos, que ha sido utilizada por el hombre desde tiempos inmemoriales por sus cualidades psicoactivas y estupefacientes en numerosos rituales y ceremonias. Ya sólo la denominación genérica "Datura" deriva del nombre del veneno indio "dhât", utilizado por los miembros de la letal secta thug o "de los estranguladores".

Arriba, un grupo de thugs asesina a un viajero, según un grabado de la Biblioteca Británica.
Abajo, única fotografía conocida de los integrantes de dicha secta, en 1894.
No quedan muchas ganas de conocer a los chicos (vía)

   Tradicionalmente se le han atribuido propiedades mágicas y adivinatorias. En efecto, en la Antigua Grecia era usada en las fiestas en honor al dios Dionisios, costumbre que perduró en la historia ya que posteriormente fué de igual manera consumida, entre otras plantas alucinógenas, en las fiestas bacanales de las devotas del dios Baco en la Antígua Roma. En la Edad Media, junto con la mandrágora o la belladona, formaba parte de los brebajes y ungüentos que supuestamente las brujas elaboraban para volar o bailar con Satanás... y así lo confesaban al quemarse en la hoguera, aunque lo más probable sea que su viaje fuese más bien una experiencia psicotrópica entre espasmos y convulsiones.


A la izquierda, vista parcial de "La jeunesse de Bacchus" de William Bouguereau, en el que se representa una de las famosas fiestas en honor al dios Baco. A la derecha, una representación de un Auto de fe o quema en la hoguera. La Santa Inquisición se basaba para determinarla en pruebas tan irrefutables como la disposición de los lunares en la piel de las supuestas "brujas". (vías 1 y 2) 


   También se consume (en infusión o mezclada con kif) como alucinógeno por chamanes y hechiceros en el continente africano, se ha vinculado a la adoración de Shiva o dios hindú de los aspectos creativos y destructivos del universo, y los nativos norteamericanos la utilizaban en sus rituales o para tratar mordeduras de serpiente ya desde la prehistoria. Era casi con toda probabilidad el ingrediente principal del "wysoccon" usado por los indios algonquinos del este de Norteamérica antes del ritual de iniciación a la edad adulta, y en el antíguo México se utilizaba en la adivinación, la profecía y la curación ritual. Evidencias arqueológicas y arqueobotánicas indican su presencia también en contextos funerarios en el período alfarero temprano del centro de Chile. (fuente)



¿Qué podrían tener en común un chamán africano, un indio angloquino, y el dios Shiva? (Vías 1, 2 y 3)



   De hecho, en la actual cultura mapuche existe la práctica de suministrar a los niños una vez en su vida esta planta, llamada «miyaye» en idioma mapudungun, para predecir su futuro de acuerdo con el comportamiento que tengan al estar bajo sus efectos.

Pasado, presente y futuro en la cultura chilena mapuche (vías 1 y 2)



   Un capítulo curioso se dió en 1616 en la localidad norteamericana de Jamestown (Virginia), cuando ante la amenaza de una rebelión el capitán John Smith (¡si, si! ¡el mismo capitan y explorador al que salvó la vida Pocahontas al tirarse a sus brazos en el mismo instante en que su propio padre iba a matarlo!) dio a sus soldados una sopa con hojas de estramonio. Otras fuentes apuntan a un consumo fortuito por parte de la compañía, aunque lo cierto es que a causa de ello los soldados tuvieron que ser encerrados debido a los altercados que generaron por las alucinaciones que sufrieron durante días. Desde entonces en el mundo anglosajón, se le denomina al estramonio Jimson weed, o "la hierba de Jamestown".


El siempre controvertido Capitán John Smith, protagonista de numerosas aventuras y desventuras (vías 1 y 2)


   Otro hecho curioso más reciente fué aquel en que, aprovechando que comparte familia con tomates, patatas o pimientos (familia Solanaceae), se consiguió injertar una planta de tomate sobre el estramonio. La osadía tiene el mérito de ser la primera vez que alguien consiguió "tomates alucinógenos", aunque sus consumidores tuvieron que ser rápidamente hospitalizados y no les quedó muchas ganas de repetir.

El fruto es una característica cápsula ovoide irregularmente espinosa, de hasta 10 cm de longitud.

   Sin embargo no hay que tomar en broma el consumo de esta planta, no en vano ostenta el récord mundial de intoxicaciones por plantas venenosas. De hecho lo es hasta el punto de que es frecuente en los países del este de Europa enseñar a los escolares desde su más tierna infancia a distinguirla y evitarla, debido a los frecuentes accidentes acontecidos por el consumo de sus dulzonas flores y semillas.

   Los alcaloides tropánicos de su composición química (tanto hiosciamina como atropina y escopolamina, responsables de su fuerte toxicidad) se encuentran tanto en raices, hojas, tallos flores y frutos. Sin embargo son sus hojas y oscuras semillas en fresco las que resultan ser  más tóxicas. Una ingestión de apenas cuatro o cinco gramos resultaría con toda seguridad letal. ¡Hasta la miel realizada con polen de estramonio es extremadamente tóxica!

La bella flor del estramonio ha sido causa de innumerables intoxicaciones por su consumo accidental.

   El estramonio en polvo es considerado una droga alucinógena, aunque no está controlado ni fiscalizado (salvo puntuales restricciones en poblaciones nativas de América) debido a que sus efectos alucinógenos normalmente son desagradables y de difícil manejo. Su consumo produce delirios y alucinaciones durante horas, pudiendo producir finalmente la muerte del individuo en función de la cantidad ingerida. A pesar de la peligrosidad que conlleva, su uso medicinal ha sido bastante profuso.

   Se cree que fue introducida en Europa por los comerciantes españoles desde el continente americano, y fué cultivado en Inglaterra por John Gerard hacia finales del siglo XVI, a partir de semillas obtenidas en Constantinopla. Ya los colonizadores ingleses del siglo XIX observaron en la India cómo se inhalaba el humo resultante de quemar sus raices para tratar el asma. Posteriormente fué introducido el remedio contra esta dolencia en la cultura europea, y ejemplo de ello fué la compañía R. Schiffmann con su producto "Asthmador", compuesto en un 50,4% de estramonio, y un 4,5% de belladona. Producto que se vendía sin receta ni control, y que finalmente derivó en una forma fácil de adquirir una droga alucinógena legalmente, cuando no por delincuentes para incapacitar la voluntad de sus posibles víctimas. En realidad, el uso de la droga se debe, en gran medida, a las experiencias de Anton Von Störck en el siglo XVIII.



De izquierda a derecha, el naturalista y botánico inglés John Gerard, el médico austriaco Anton von Störck,
y ya abajo los famosos cigarrillos del Dr. R Schiffmann (vías 1, 2 y 3)

   De forma más local, la medicina popular contemplaba también la inhalación del humo de estramonio como remedio contra el asma y otras dificultades respiratorias. También la cataplasma hecha con sus flores se consideraba remedio en heridas y picaduras de insectos, actuando como anestesiante o analgésico. Se ha utilizado en tratamientos contra calambres, inflamaciones oculares, procesos febriles, espasmos estomacales o epilépticos, y hasta como afrodisiaco.


Sus semillas son altamente tóxicas. Apenas 5 gramos podría resultar una cantidad suficiente
 para provocar la muerte de un hombre adulto (vía).



   Pero sus aplicaciones medicinales, aún siendo numerosas, son de difícil aplicación y por ello en absoluto justificadas: Los efectos tóxicos aparecen con dosis de 57 mg/kg, aunque es un hecho comprobado que la concentración de alcaloides varía enormemente de una planta a otra, por lo que la aplicación de una dosis es imposible de cuantificar con certeza sin un control médico. Los principales síntomas de su ingesta son dilatación de la pupila, sequedad de la boca y la piel, mareo, pulso débil, hipertensión, convulsiones, alucinaciones, temblores y, agravándose, parálisis y coma. Variación en el ritmo cardiaco, fiebre y dificultad para respirar son acompañadas de paranoias, comportándose la persona de una manera inquieta, maniática, violenta, hablando de forma contínua y entrando en frenético delirio para caer agotadas vencidas por el sueño. Es habitual que los efectos del envenenamiento se mantengan durante varios días.

Las flores, solitarias y axilares, aparecerán allá por el mes de mayo y hasta bien entrado el otoño.

   Describía en sus informes médicos J.N. Di Giacomo a los pacientes afectados, allá por 1968, como "Ciego como un murciélago, caliente como una liebre, seco como un hueso, rojo como un tomate, loco como un sombrerero, el intestino y la vejiga pierden su tono y el corazón corre solo".

   Se cree que causan defectos y malformaciones en el nacimiento tanto de hombres como de animales de granja, aunque no es este un hecho contrastado. Sí lo es el hecho de que las semillas de estramonio pueden producir cáncer, según muetra la Prueba de Ames en su proceso estándar.

Haz y envés de sus ovaladas, aunque irregularmente dentadas hojas.

   Determinarla no es complicado, y aunque el género Datura incluye varias especies polimorfas y similares, resultan todas ellas igualmente tóxicas. En concreto, la Datura stramonium se presenta en cuatro variedades que difieren en el color de las flores (blanco y violeta) y el número de espinas en sus cápsulas. Puede llegar a medir 1,5 metros, y se adapta a todo tipo de suelos, prefiriendo los suelos algo sueltos y abundantes en nitratos. Desprende un olor fuerte, característico, que hace que el ganado no suela consumirla a pesar de la profusa bibliografía existente que data intoxicaciones en terneros, cabras, caballos, pollos, ovejas y cerdos. En estos casos, los síntomas son similares a los ya descritos para el hombre.

   Las hojas tienen forma ovado-lanceoladas, apuntadas y ligeramente dentadas, pecioladas y de entre 5 y 18 cm de longitud, mientras que sus tallos son cilíndricos y algo pubescentes. Tiene flores solitarias, axilares y blancas de hasta 10 cm en forma de trompeta pentalobulada, que en ocasiones tienden a colores violáceos, amarillos o verdosos. Florecerá desde el mes de mayo hasta bien entrado el otoño, y dará lugar a unos llamativos frutos en forma de cápsula ovoide y desigualmente espinosa, de tres a siete centímetros de longitud.

   Agrícolamente se le considera una hierba no deseada en huertas poco cuidadas y cultivos de secano. Sus semillas matan por envenenamiento a los ratones, por lo que también se ha usado para controlar (de forma nada selectiva) plagas de roedores. A pesar de su peligrosidad también está presente en la actual jardinería, debido al lustroso color verde de sus hojas y a su bella floración. Además resulta tener un marcado carácter insecticida, acabando con numerosas larvas de insectos que al alimentarse con las hojas del estramonio se envenenan y mueren.

   En caso de intoxicación, se recomienda ir lo más rápido posible al centro hospitalario más cercano, explicando el origen de la dolencia. Si el consumo ha sido reciente y no hay un hospital cercano, previamente se aconseja la utilización de un vomitivo o purgante antes de dirigirse al centro médico.

Su bella floración ha hecho que el estramonio, a pesar de su toxicidad, sea usada en jardinería.